Prost!

El viernes pasado fue una noche de celebración, y el lugar que elegimos para festejar fue Der Krug, un restaurante donde además de ofrecer comida alemana, también fabrican su propia cerveza. En esta ocasión sólo fuimos a tomar algo y nos decidimos por la cerveza recomendada, la Hefe Weizen (cerveza clara, hecha a base de malta de trigo y de origen bávaro), que sin duda fue una buena elección (550ml aprox. $58). El ambiente es muy agradable y se puede escoger entre sentarse adentro o en la terraza. Banderas de colores como la de Baviera y Baden-Wurtemberg  adornan el lugar.

Canasta de pan y Brezel

No importa si vas a beber o a comer, en cuanto te sientas te llevan una canasta con pan tostado y un brezel. Si deseas comer más, puedes pedir una orden de 3 por 28 pesos.

Al día siguiente, regresamos a Der Krug  para probar la comida. Compartimos un plato que traía chamorro baviera (Haxe), que es preparado con la receta de la casa; milanesa ( Schnitzel), col agria (Sauerkraut) y una variedad de salchichas alemanas (Bratwurst). 

Plato de salchichas, col agria, chamorro y milanesa

La comida fue abundante para dos personas, así que la recomiendo para compartir entre 3. Lo mejor del plato fueron las salchichas, en especial las pequeñas, que se llaman Nürnberger Bratwurst. Finalmente entre la comida y la bebida de ese día (naranjada) gastamos aproximadamente $350, pero bien pudo haber comido otra persona con nosotros.

Pronto regresaremos para probar la ensalada de papa y comernos un strudel de manzana.

Lugar: Der Krug Brauhaus

Comida: Alemana

Ubicación: Miguel de Cervantes 15, esquina con Morelos, Guadalajara, Jalisco

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Le coq à poil

La Diva

Una de las ventajas que tiene salir a comer en pareja es que todas las comidas las puedes compartir. Eso es lo que hacemos Juan y yo cuando vamos a Le coq à poil, un pequeño establecimiento escondido cerca del edificio de la UDG, frente la esquina donde se pone la carreta de los legendarios hot-dogs del Chino.

Si pasas por ahí buscando, podrás distinguir el local por los colores amarillo y rojo de sus paredes, como los de la bandera de Valonia. En un librero tienen una colección de libros en francés a la venta, y a veces sus paredes se adornan con cuadros de alguna exposición de fotografía o pintura. 

La Reina

En Le coq à poil  tienen muchas variedades de crepa, pero nuestras favoritas son la Reina y la Diva. De postre, les recomendamos la crepa Congo, de plátano con chocolate y el waffle Suprême, que lleva helado y salsa de chocolate. Además, para los que se quedaron con algún antojo, venden waffles empacados, hechos en casa y sin conservadores. De tomar tienen Boing, Pascual, chocolate caliente y frío, café y jugo de naranja.

Boing de guayaba y de mango

Waffle Suprême

El lugar es pequeño, y los sábados en la noche puede ser necesario esperar mucho tiempo a que se desocupe una mesa. A nosotros nos gusta ir los domingos en la mañana, porque hay menos gente y es el complemento perfecto para un paseo por la Vía Recreactiva.

Waffles para llevar

Advertencia: la puerta del baño se atora; si a usted le sucede tal desventura, haga como dice el cartel de la puerta: ¡¡¡jale o grite fuerte!!!. 

Lugar: Le coq à poil

Comida: Crepas y waffles

Ubicación: Escorza 46, Guadalajara, Jalisco

Deli, deli, delicioso

Lo que nos llevó hasta este lugar fue la reseña que Juan leyó en una revista que hablaba de varios restaurantes de Guadalajara. Por la manera en la que describían al Boca 21, decidió visitarlo un día que estaba caminando por Chapultepec. Entró y se sentó en una mesa, mientras pensaba en el platillo que probaría ese día. Como era muy temprano, no había comensales así que después de un rato de estar sentado, los empleados comenzaron a verlo raro. Juan se preguntó qué sucedía y cuando se acercó una muchacha a limpiar la ventana, le dijo que era su primera vez ahí y le explicaron que tenía acercarse a la barra para ordenar, pagar y recibir su comida, tal y como ocurre en un restaurante de comida rápida. 

Jugo de mango

Sin embargo, Boca 21 no es como los restaurantes de comida rápida a los que estamos acostumbrados, donde te despachan tu hamburguesa de plástico en una charola de plástico y te mandan a sentarte en una mesa también de plástico. La decoración es cálida y acogedora, y su decoración me recuerda un poco a la cocina de mi abuela, con adornos hechos de muñequitos de tela que cuelgan de las paredes y una mesa que exhibe, junto a una bolsa tejida y algunos contenedores de distintos materiales, ingredientes que se encuentran en todas las cocinas, como huevos y tomate. 

La comida es deliciosa, y se antoja con sólo leer el menú. Juan salió tan contento de ahí, que decidió que teníamos que regresar a comer los dos. Cuando fuimos, pedimos un gazpacho ($14), un bagel de rosbif con queso gouda ($53) y una chapata Ibiza ($50) que está hecha con un riquísimo chorizo español, queso manchego y tomate. Otra buena recomendación es el bocadillo Italian Beef, donde además de la carne de res horneada también te dan en un recipiente aparte el jugo de la carne para aderezarlo. Para tomar, un jugo de mango ($18) o una sangría  ($20) son nuestra recomendación.

Gazpacho

Bagel de rosbif

Chapata Ibiza

Bagel de rosbif

Otro día fuimos a desayunar, y pedimos lo mismo los dos: un croissant con jamón, huevo y queso ($28). ¡Rico! También hay pasteles, pan francés, y quiches. De tomar hay café, jugos y chocolate caliente.

Croissant con jamón, queso y huevo

Actualmente hay en Guadalajara tres Boca 21: uno en Chapultepec que es nuestro preferido, otro en Plaza del Sol, otro en Manuel Acuña y uno más en La Gran Plaza. En el DF, en la colonia Condesa también hay uno. Dado su éxito, esperamos pronto encontrar más de estos lugares.

Lugar: Boca 21 

Comida: Sándwiches, pastas, wok, desayunos.

Ubicación: Chapultepec Sur 193, Guadalajara, Jalisco.

Empanadas, Fito, pizzas, Calamaro y choripanes

Pizza especial del ché

¡Hola!

Decidimos empezar este blog con uno de nuestros lugares preferidos para comer en Guadalajara. Lo encontramos por pura casualidad, un domingo que regresábamos del centro. Ya era tarde, estábamos cansados y no habíamos comido nada. Mientras manejábamos pensando en un lugar para comer, decidimos ir a el Ché, porque ya teníamos un tiempo con ganas de ir a comer a un restaurante argentino.

Fue amor a primera vista a primer bocado. Ese día pedimos varias empanadas diferentes, una pizza y un choripán. En las siguientes visitas variamos un poco nuestras órdenes, y fue así como probamos los alfajores y el bife de chorizo, que ha alcanzado gran fama (al menos para mí) gracias a una canción de Calamaro.

Empanada de cuatro quesos

Hay tres cosas que no pueden faltar en nuestra mesa cada vez que vamos: empanadas, pizza y nuestro amado choripán, que es sencillo y económico. Nos gustó tanto, que decidimos ponerle así al perrito callejero que adoptaremos un día.

En el menú hay empanadas, pizzas, pepitos, cortes de carne, ensaladas, milanesa a la napolitana, postres, vinos, y claro, choripán. En la mesa hay salsa chimichurri para aderezar los platillos. Todo esto acompañado por música de la que hasta ahora hemos podido reconocer canciones de Fito Páez y Andrés Calamaro, además del ambiente argentino que brinda el acento de sus propietarios que personalmente atienden el local.

¡Buen provecho!

Choripán

Lugar: El Ché

Comida: Argentina

Ubicación: mapa